Desde su creación en la década de 1980, Internet ha recorrido un largo camino. La primera iteración de Internet se centró principalmente en consumir contenido con pocos usuarios publicando contenido y la mayoría consumiéndolo pasivamente.
La segunda iteración fue la Internet social donde los usuarios generaban y consumían contenido y había algunos proveedores de plataformas que alimentaban los canales para la generación y el consumo de contenido.
La tercera generación -llamada Web 3.0- lo hará transformar este paradigma introduciendo un Internet totalmente descentralizado y democratizado, que no está controlado por una o un puñado de entidades.
Junto con la Web 3.0, el Metaverso será otro factor importante que determinará cómo generamos y consumimos contenido. En Metaverse, los usuarios existen e interactúan en realidad virtual (VR) y pueden beneficiarse de la interoperabilidad entre diferentes espacios de VR. Así es como se relacionan los dos conceptos, cómo se diferencian entre sí y sus similitudes.
Definición web 3.0
Web 3.0, o Web3, se refiere a la próxima iteración de la World Wide Web, que está democratizada y basada en la tecnología de la web semántica.
La web semántica es un concepto sugerido por primera vez por Tim Burners Lee en 1999 como un tipo de mecanismo de exploración de Internet en el que las máquinas pueden leer y comprender datos en línea y formar correlaciones significativas.
algunos analistas sugieren que la Web 3.0 también tendrá un nivel de interacción espacial, en el que también cambiarán los mecanismos que los internautas explotan para utilizar Internet.
En lugar de escribir una consulta de búsqueda, los usuarios dependerán más de la participación de voz, imágenes e interacciones que conviertan Internet en una experiencia espacial.
La Web 3.0, por tanto, se define por tres características fundamentales:
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esta democratizado – La Web 3.0 se basará en un protocolo blockchain descentralizado donde no existe una propiedad centralizada de contenidos, servicios o plataformas. Significa que los creadores de contenido Web 3.0 serán compensados de manera justa y habrá menos burocracia para acceder al contenido.
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es semántico – la web semántica no es idéntica a la web 3.0, pero es una tecnología subyacente a la tercera generación de internet. Permitiría la correlación de múltiples páginas de Internet utilizando un protocolo semántico para que las relaciones entre las páginas sean evidentes, indexadas y buscables.
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Podría ser de naturaleza espacial. – Mientras que la Web 1.0 y la Web 2.0 ofrecían experiencias bidimensionales, la Web 3.0 puede ser inmersiva y ofrece experiencias espaciales similares al mundo real. Para lograr esto, habrá una capa espacialmente interactiva sobre la capa de información digital, que utiliza activadores y controles sensoriales como voz, gestos, comandos biométricos y otros.
Es esta última característica la que hace que la Web 3.0 sea similar al Metaverso, pero las dos tecnologías son distintas entre sí.
¿Qué es el Metaverso?
El metaverso es un espacio tridimensional inmersivo impulsado por realidad aumentada, virtual y mixta, que permite a los usuarios interactuar con objetos 3D.
Su objetivo es crear una réplica virtual del mundo real, con espacios designados para el trabajo, el juego y las actividades sociales. Todos estos espacios serían interoperables entre sí y el metaverso estaría alojado en la cadena de bloques para que no haya una sola entidad que lo controle.
Actualmente son empresas como Decentraland, The Sandbox y Meta Platforms Inc. desarrollando el Metaverso, pero todavía tiene que ver una adopción realmente generalizada a la par con Internet.
Web 3.0 vs Metaverse: diferencias clave
El Metaverso se diferencia de la Web 3.0 en cinco aspectos:
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inmersión intrínseca – La Web 3.0 no es intrínsecamente inmersiva y tendrá procesamiento de capa de información digital utilizando tecnología de web semántica, con capas superpuestas de interacción espacial. Web 3.0 puede funcionar incluso sin la capa de interacción espacial, lo que no es el caso con Metaverse, ya que se basa en interacciones espaciales en un entorno inmersivo que imita el mundo real.
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Casos de uso – La Web 3.0 seguirá sirviendo en gran medida para los mismos propósitos que nuestra iteración Web 2.0 actual de Internet. Los usuarios pueden buscar información, conectarse con otros, crear y consumir contenido, aprovechar los servicios en línea, etc. Metaverse también abre nuevos casos de uso, como la colaboración virtual en 3D para equipos y la realidad virtual social.
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Tecnología del núcleo – Web 3.0 también se basará en la última versión del Protocolo de transferencia de hipertexto (HTTP), impulsado por inteligencia artificial (AI) para mapear relaciones semánticas. El metaverso se construirá utilizando VR, métodos de interacción humano-computadora, diseño y modelado 3D y otros, junto con AI.
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Actores que lo desarrollan – Los desarrolladores construirán la Web 3.0 utilizando una base de código fuente completamente abierta. Así como ninguna entidad individual ha construido la Internet actual, tampoco será posible atribuir el desarrollo de la Web 3.0 a una sola persona. Sin embargo, Metaverse dependerá de los esfuerzos concertados de algunas empresas para su desarrollo, al menos en las primeras etapas. Una vez que la plataforma esté en su lugar y las herramientas estén democratizadas, el código base eventualmente podría convertirse en código abierto.
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El estado actual de disponibilidad – La Web 3.0 todavía está en una etapa de idea y no hay una prueba de concepto como tal. De hecho, la definición precisa de Web 3.0 puede variar entre analistas, investigadores y comentaristas, lo que indica sus etapas muy tempranas de madurez. Por el contrario, Metaverse está actualmente en desarrollo, con varias plataformas disponibles para su adopción.
Similitudes entre Web 3.0 y Metaverse
A pesar de estas cinco diferencias, la Web 3.0 y el Metaverso están relacionados y, en muchos sentidos, ambos son parte de una revolución en curso en la forma en que interactuamos con la tecnología digital.
El consumo de contenido siempre ha sido un proceso pasivo, configurado y administrado por unas pocas entidades grandes, pero tanto la Web 3.0 como el Metaverso se basan en una arquitectura de cadena de bloques, lo que permite un grado de democratización sin precedentes.
Además, ambos usarán IA para hacer que la experiencia sea más fluida: Web 3.0 la usará para correlaciones semánticas y Metaverse la usará para reconstrucción 3D. Finalmente, se espera que el Internet de las cosas (IoT) desempeñe un papel en el auge de ambas tecnologías.